Extraño al amigo cálido
que con sus brazos me abrigaba,
al amigo callado que en silencio
con atención me escuchaba,
aquél que con una sonrisa
tan sincera me alegraba.
Extraño al amigo tierno
y fiel que con el corazón
siempre su cariño me entregaba,
aquél que sabe estar en el
lugar indicado, a la hora precisa
para decir las palabras correctas
en momentos de duras penas.
Extraño tu amistad
por que es mi fuerza
en la dificultad,
es el motivo que
me ayuda a continuar,
extraño tu presencia
por que a diario
mi alma sufre tu ausencia.
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